miércoles, 9 de marzo de 2016

Volver a la eternidad de mi ciudad



Vuelvo a verte testigo de mi vida, allí donde me criaste entre azahar y amaneceres de mil días. Vuelto a verte paseando de la mano del corazón que me acompaña para reconciliarme con el pasado y de las heridas ya perdidas. Al llegar a ti me recuerdo en aquellos días en que tuve que partir, diciéndote adiós obligado inmigrante por el avatar de lo vivido, hasta que vuelvo a ti, ahora vivo y lleno de sentimiento por ti, guiando a quien me ama por los recuerdos de mi infancia, por las imágenes de los momentos en las esquinas de mi adolescencia como un tesoro que en ti quiero depositar para que seas la guardiana de todo aquello que amé y que ahora te pertenece al igual que te pertenezco yo. Vuelvo a verte y a contemplarte desde la altura de la historia que nos hizo encontrar, y ahora qui desnuda el alma sin mas, no puedo más que decir que aquí estoy de nuevo mi ciudad de color especial, porque llegó el momento de amar y ser amado, porque llego el momento de volver a la eternidad de mi ciudad contigo, juntos, hasta el final.

Dedicado a Griselda y a mi ciudad

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