Sino es porque te acuerdas de mi...

Si no es porque te acuerdes de mi o me echas de menos, no lances tus palabras al aire con un "hola" vacío de contenido, por compromiso. Si tus visitas al mar de mis palabras no son de tu necesidad, sino que solo te mueve la curiosidad, cierra el libro de mis pensamientos y déjalo morir entre mil páginas de tu pasado. Para mi un saludo del corazón es lluvia de primavera que hace florecer mil esperanzas de saberte importante para alguien. En el mundo, ahora mismo, una hija cuida a una madre, un padre disfruta de la sonrisa inocente de su hijo, dos amantes se besan tiernamente, o una amiga se sabe querida por que sabe que tiene un amigo, o seguramente y también, alguien sufre por una muerte inesperada, o por un adiós inesperado, por la lejanía del ser amado, por no poder amar lo que por derecho corresponde. ¿Acaso no sabes que todos somos iguales, y que tanto el que esta arriba como el más pobre todos acabamos en el mismo sitio? El mundo está lleno de esperanza y ese es el nombre sagrado de los que han comprendido lo que es la vida. Prefiero haber sido yo un segundo que haber vivido la vida de nadie. El tiempo devora cada segundo de tu vida y engorda el momento del final, y entonces harás balance y lamentaras lo que pudiste hacer o vivir y no lo hiciste. Por eso, si no es porque te acuerdes de mi desde el fondo de tu corazón, no dejes pronunciar una palabra que llegue a mi vacía. Cuando por la noche te acurrucas entre sábanas, ¿no es acaso el soñar con vanidades lo que te altera el conocimiento? Prefiero soñar despierto que morir dormido. Prefiero ser loco vivo que cuerdo entre lamentos.

Tengo una caja de cartón, de esas del "super", y he decidido ir tirando en ella todo aquello que ya dejo de tener valor para mi. Y cuando este llena llamaré al basurero del tiempo para que se lleve esa caja y la tire en el depósito de los recuerdos inútiles. ¿Quien sabe? Lo mismo alguno de mis recuerdos inútiles le sirva a alguien de fertilizante y haga brotar la esperanza en quien no la buscaba, o en quien la buscaba y no la encontraba. ¿Quien sabe?

Si no es porque te acuerdas de mi o me echas de menos, no recuerdes mi nombre porque para mi es sagrado. Dame un río de tiempos y haré una eternidad.