Algo virtual

Amores virtuales de deseos escondidos y no confesados. Timidez inconfesada escudada tras el anonimato. Buscadores de ilusiones falseados de imágenes no reales, dando una imagen que no es, para atraer, vertido de mil reclamos.mentiras y verdades mezcladas en un popurrí de frases sin sentido o infladas. Búsqueda desconsolada abierta al vértigo de la velocidad, del aquí y ahora. Ventanas abiertas a la posibilidad de la incapacidad de lo real en existencias llenas de vació humano, buscando un consuelo, buscando una esperanza, buscando una oportunidad. Alguien con quien caminar. Interruptor que abre un espacio para liberar la ansiedad dejando que el alma hable de valles encantados o de modas imposibles, de modelos sin sentido o de historias para no dormir. Para algunos es su consuelo, para otros su diversión, para muchos una rutina laboral y para casi todos una posibilidad para huir de la soledad. Mentira y verdad, espacio y virtualidad, un momento on-line para viajar.

Horizonte de mi anhelo

Miro al horizonte de mi anhelo y rozo con los dedos de mi esperanza la sonrisa de un niño, el beso sincero del amor, y es entonces cuando entiendo que la esperanza de mi vida aún no se perdió, y es entonces cuando me doy cuenta que soy inocente de mi locura por la vida, que Dios, aunque siempre escondido a mis ojos, está siempre visible en mi corazón, y me recuerdo a mi mismo como soy y lo que soy, y añoro mi paraíso perdido y vivo para recuperarlo.

Me siento en paz y libre de los sin sentido

Señores me siento en paz y libre de apreciaciones sin sentido, porque mi pluma solo escribe de mi y para mi. Mi mochila lleva su justa carga y a nadie hago mal con su peso, porque asumo ser consecuente con mis pensamientos y con mis actos. Dios me libre de enfermizas mentes que por no asumir sus propias historias buscan refugio en dependencias de otros, mendigando amor cuando no saben amar, Justificando su incapacidad en la fútil creencia de estar rodeados de falsos amores, muchas veces motivados por puro interés. Me cansa que pretendan que coja un camino que no me corresponde. Pretenciosos intelectuales, fatuos maestros. Imberbes consejeros de consejos sin sentido. Enfermos de pena y decepción que diagnostican la culpa siempre en los otros. Si señores, dejadme andar mi camino, cargado de mi peso que yo asumo y a nadie culpo, dejadme ser yo sin más, que nada pido a nadie y a nadie juzgo por nada. Inocentes presuntos inteligentes que aparentan ser fuegos y solo acaban quemándose. De pseudo amigos disfrazados de Judas, prestos a salir corriendo al mínimo inconveniente;  no necesito de ellos no, sino más bien verlos pasar muy en la distancia. No quiero palabras de amor dichas con la boca, traicionadas con la mente, y falsas en sus actos. No creo en amores dichos con palabras y mentidos en cada instante, falsos y patéticos. Mejor cerrar los ojos y respirar profundo, dejando atrás fantasmas y espectros.

No deseo mas circos de espectáculos de saltimbanquis  y acrobacias resueltas de piruetas. Prefiero ser payaso que regala sonrisas, vestido de pantalones imposibles y llenos de colores, de tirantes que cuelguen mi ilusión, y ojos chisposos llenos de brillo y aún llorosos por la estupidez. Andar caminos con inmensos zapatos y con zancadas imposibles. Sonreír, al fin, con benevolencia, y brincar haciendo sonar chapoteo de charcos de felicidad. Mirar al horizonte y mirar asombrado como lo hace un niño, y verlo que no se ve, y saber lo que no se sabe. Descartar cualquier lágrima y acoger cualquier sonrisa. Sentirme en paz, libre y no mirar jamás atrás, alejándome hacia el horizonte hasta hacerme tan pequeñito que me funda con el, y dejar de ser para ser yo, para amar.