¡¡Tanto tiempo esperándote con un beso en los labios!!

¡¡Tanto tiempo esperándote!!, y a poco que apareció se esfumó entre poemas de promesas, y en el camino transitado de la vida a veces encuentras sin buscar y a veces buscas sin encontrar. Mientras paseas por la ciudad la brisa de su perfume te saluda, y en el fondo de tu alma sabes que es ella, y se produce el encuentro en la llamada de atención de una mirada limpia y clara, pero que te hace dudar si será verdad, y que durante un tiempo te hace sentir, ilusionar y hasta levitar. La sonrisa tonta aparece sin más y en el debatir diario te consuela su oasis de donde quieres beber continuamente. Pero en el desierto de la noche el sonido de su voz te consume el alma que creía rozar sus dedos y hasta casi su alma. ¿Porqué será que el sentir siempre arrastra el vértigo del sin sentido? Me hubiera gustado sentir ese beso que provoca y hacer que las almas se abran y el universo se colme de estrellas, rozar sus labios y grabar retazos de esperanza. Y si al fin es ella, pasear chapoteando charcos de lluvia enamorada. Echarla de menos, añorar su hermosura y su ternura. Amarla al amanecer y hacer que el día brille aun más. ¡¡Tanto tiempo esperándola!! y a poco que amanece ya no está, y el desconcierto del sueño de hermosura me despertó. Aun sigo esperándola, aún sigo soñando si alguna vez reconoceré su aroma de mujer, a la espera de que una mirada se cruce en mi camino y me diga que ya se acabo la espera, y que cuando la bese sepa lo que nadie supo nunca, y es el descubrir porque un beso es más certero que mil sabidurías, y que al rozar de los labios sepa su nombre, aún sin haberlo sabido nunca.Estar, vivir, amar. Ese es su nombre, y te veré en el rincón donde guardo el corazón y que tan solo vives tu.

Dia de la primavera en "Lo que la Rubia Diga"

La Rubia

La paella de la Rubia

Hasta un pastor afgano quiso compartir este dia

Día de la primavera en Badajoz, una paella para regalar a los amigos, un día para tomar el sol y parar en "Lo que la Rubia Diga" donde todos están invitados y los ratos se hacen entrañables. Si pasas por esta ciudad y te pierdes por el centro, pregunta por "Lo que la Rubia Diga" y será fácil de encontrar.

¡¡Ay Sevilla, mi Sevilla"

¡¡Oh, Sevilla!! ¡¡ La Sevilla que me vio nacer, la Isbylia que me vio crecer morisca.!! La que me acompañó en sus paseos por su calles sinuosas que te embriagan de olores y sensaciones. La que me acunó a la brisa del Guadalquivír y con su sombra filtraba los rayos del sol. Ciudad de sensaciones y colores, hecha para amar. Testigo de poetas y escritores, pintores y escultores que marcaron la huella de tu identidad. Amanecer en Sevilla es dar un paso al paraíso. Judería y barrio de Santa Cruz sembrado de perfumes de azahar y dama de noche. Balcón de Triana que contempla majestuosa tu historia. Dime, Sevilla, ¿porque me elegiste a mi entre tus hijos? ¡¡Te echo tanto de menos que te llevo en mi alma!!. Clavellinas, azahar y dama de noche, geranios colgados de balcones y claveles de abril me estremecen el alma, y cualquier amor humano tu consuelas su decepción. ¡¡Ay Sevilla, mi Sevilla!! La que me vio crecer, desear, vivir y caer para volver a levantar. La que me marco quien soy y lo que soy. La que un imperio deseo y nunca poseyó,porque Sevilla es color y amor, pasión y emoción, tentación y canción. Sevilla, mi Sevilla, te echo de menos y me duele no tocarte, me duele no sentirte. Extranjero soy en tierra extraña y siento tu recuerdo y mis sensaciones de ti. Y en mi interior susurra tu nombre y me siento lleno y pleno, orgullosos de ser de donde soy. ¡¡Ay Sevilla, mi Sevilla!! ¿Porque me amaste tanto que ya no puedo vivir sin ti? Tu viste mi primer beso y mi primera lagrima, mi primera sonrisa y mi primera emoción. Y cuando me sentaba al borde del Guadalquivír sus aguas reflejaban mi ilusión. Camino por Sevilla con el sonido de sus gentes, y me pierdo entre sus calles y me rencuentro a mi mismo. ¡¡Ay, Sevilla mi Sevilla!! Cuando Dios descanso de la creación te creó para el amor.

Ya es fantasma del pasado

Amor en el horizonte

Amanecía en el horizonte con su amor entre las manos, y encontró la esperanza entre las manos de ella, que me regaló sus alas para volar al paraíso, acostumbrándome a respirar solo pronunciando su nombre. Cargué mi mochila de ansia e intensidad y caminé hacia el infinito, camino de la eternidad. La sed del camino la sacie con sus labios y el cansancio del caminar lo recuperaba cogido de su mano. Felicidad era el nombre con el que nos reconocíamos a cada instante, y a la respuesta al amor le dimos el nombre de ilusión. La realidad desapareció y creamos un mundo de emoción, de deseo y pasión, cercanos y lejanos, humanos y hermanos, reconocidos como únicos entre los únicos. Los obstáculos del camino los ignoramos y su silencio me mató, porque el amor en el horizonte me descubrió que era solo mi ilusión, que nunca podría ser. Ahora mi mochila esta más llena de ilusión, ahora mi mochila sigue buscando su rostro en todas ellas y sus gestos en cada mujer, esperando reconocer algún día que sea solo ella y que el amor en el horizonte no sea una ilusión, y que el camino sea real y andado con emoción, hacia el infinito, hacia la eternidad, reconociendo su nombre, ese que es el nombre de la mujer, única entre las únicas.